Son muchas, las virtudes que la betarraga tiene para combatir la toxicidad hepática y otras dolencias biliares, como la ictericia o la hepatitis, pero además cuenta con otras ventajas, ya que también es útil para las intoxicaciones alimentarias, diarreas o vómitos. Por otro lado, se ha demostrado que el jugo de betarraga es bueno para limpiar la sangre y el colon, así como para fortalecer la vesícula biliar y el hígado.
El alto contenido en hierro de la betarraga regenera y reactiva las células rojas de la sangre suministrando oxígeno fresco al cuerpo, mientras que su elevado contenido de cobre colabora junto con el hierro para crear mas glóbulos rojos. Por tanto este jugo es un gran constructor de sangre.
En cuanto a la zanahorias, estas cuentan con numerosos nutrientes que pueden aumentar la capacidad antioxidante del hígado, además de neutralizar los radicales libres capaces de dañar el hígado y otros órganos. Por otro lado, su alto contenido en flavonoides y betacorotenos contribuyen a reducir el exceso de agua y grasa acumuladas en el hígado. También se cree que el extracto de zanahoria puede ayudar a proteger el hígado de los efectos tóxicos de sustancias químicas ambientales.
Por su parte las naranjas son ricas en vitamina C, la cual, aparte de favorecer al sistema inmunológico, cuenta con propiedades de limpieza y depuración sobre hígado y pancreas, evitando la contaminación causada por la acumulación de grasas.
Sol
